Cuando pidas un préstamo a cualquier institución financiera regulada en México, seguramente encontrarás las tasas de interés, cuya comprensión es de vital importancia para que puedas mantener una economía saludable.
El interés no es otra cosa que el "precio" del dinero, es decir, un monto que se paga por tener acceso a dicho recurso. Si prestas o te prestan dinero en algún banco, al devolverlo se añade una cantidad extra que suele expresarse como un porcentaje.
Esta tasa de interés está influenciada por diversos factores, pero los principales son el monto del préstamo y el plazo para pagarlo, además de la entidad bancaria donde lo solicites.
Siempre debes tomarlo en cuenta cuando pidas financiamiento para concretar algún proyecto como un negocio, e incluso adquirir una casa, un vehículo o destinarlo a un regalo especial.
Los préstamos podrían ayudarte si te encuentras en una emergencia económica, pero recuerda que la prevención puede evitarte malos ratos.
Antes de necesitar un préstamo urgente conviene que tengas ahorros para cualquier imprevisto.
¿Qué diferencia existe entre tasa de interés y CAT?
Cuando estés revisando opciones de financiamiento quizá te encuentres con el concepto de Costo Anual Total (CAT), el cual podría confundirse con la tasa de interés. Pero se refieren a cosas distintas.
El CAT, como explica el Banco de México (Banxico), "es una medida estandarizada del costo de un financiamiento porque incorpora todos los costos y gastos inherentes al crédito que son exigidos al acreditado”.
Lo anterior significa que el CAT incluye la tasa de interés de un préstamo calculada a un año, pero también conlleva pagos de anualidades, comisiones, seguros y otros conceptos que pueda exigir un banco.
Consejos para adquirir un préstamo
Si consideras pedir prestado para emprender un negocio es importante que elabores previamente un plan claro y realista. Conserva la cabeza fría para plantear metas alcanzables a corto plazo, esto para evitar el sobreendeudamiento.
De igual modo, mantén lejos tus cuentas personales y las de tu empresa, pues esta última debe ser autosuficiente. Esta división te dará claridad respecto al estado general de tus inversiones.
En caso de que busques adquirir una casa o un vehículo, busca opciones que se ajusten a tu presupuesto. Sincérate en cuanto a tus ingresos y capacidad de pago para evitar caer en situaciones financieras insostenibles.
Por último, recuerda que tu historial crediticio queda registrado por instituciones como el Buró de Crédito, por lo que conviene pagar siempre a tiempo. Esto habla de una persona responsable, comprometida, capaz, y puede brindarte acceso a mejores préstamos en el futuro.
