Definir un plan de ahorro puede parecer complicado para muchos, pero la falta de uno implica perder la oportunidad de lograr una mayor estabilidad y seguridad personal y familiar. La clave está en tomar la decisión y tener la determinación para llevarlo a cabo.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) reporta que en México la mayoría de las personas que ahorran formalmente lo hacen con el objetivo de cubrir emergencias o imprevistos futuros.
Ahorrar implica reservar una parte de tus ingresos para utilizarla más adelante. No se trata simplemente de guardar el dinero que sobra al final del mes, sino de establecer una cantidad específica que se pueda integrar sistemáticamente en tu presupuesto mensual.
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Realiza una revisión a esos pequeños gastos que realizas de manera cotidiana y que no tienes planeado, a los cuales se les conoce como “gastos hormiga”.
Cada moneda que logres guardar, deposítala en una alcancía. La idea es que una vez que se llene, formalices el hábito del ahorro y deposites ese dinero en una cuenta; ya sea en un banco, en una Sociedad Financiera Popular o en una Cooperativa de Ahorro y Préstamo.
Puedes seguir los siguientes consejos que da la Condusef para que ahorrar te sea mucho más fácil:
Muchas personas expertas recomiendan empezar poco a poco, en periodos cortos y con pequeñas cantidades, pues de esta forma se puede cumplir el objetivo con mayor facilidad.
Existen diversas formas y métodos para tener el hábito del ahorro; encuentra aquella que te sea útil y fácil de realizar.
En redes sociales circulan muchos métodos de ahorro, uno que se ha hecho viral porque no necesitas ir incrementando la suma a guardar, consiste en solo tener la constancia de ahorrar 400 pesos a la quincena por un año y así lograrás tener un ahorro de 9 mil 600 pesos.