Existen muchas formas de invertir tu dinero estando en México, y una de ellas es mediante la compra de acciones de alguna empresa. Esto es mucho más accesible de lo que podrías pensar, ya que varias plataformas digitales debidamente reguladas te permiten hacerlo.
Lo anterior es posible mediante las casas de bolsa, que según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) son sociedades anónimas que funcionan como intermediarios entre cualquier inversionista y el Mercado de Valores.
En México existen más de 30 casas de bolsa autorizadas por la CNBV, las cuales funcionan como instituciones privadas a las cuales puedes acercarte para firmar un contrato y utilizar sus servicios. En muchos casos, este proceso se realiza de forma fácil y totalmente en línea.
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Esto contrasta con aquellas opciones donde el trato es presencial, que suelen dirigirse a personas con un poder adquisitivo elevado; tú puedes comparar opciones y elegir aquella que se acerque más a tu situación personal.
También descubrirás que las casas de bolsa incluyen comisiones, las cuales varían en cada caso. Algunas lo hacen en función del dinero que coloques en una cuenta personal, la cual se utiliza para comprar y vender acciones, mientras que otras cobran un pequeño porcentaje de las ganancias que obtengas.
Antes que nada, considera que comprar acciones de empresas puede considerarse una inversión riesgosa, por lo que en DeDinero te recomendamos acercarte a un asesor financiero para que aclare todas tus dudas.
Estos profesionales pueden ayudarte a crear un portafolio de inversiones, el cual suele estar diversificado entre diversos instrumentos de inversión para así reducir los riesgos.
No obstante, si quieres familiarizarte con el proceso para comprar acciones en México, aquí te lo describimos:
Una vez que hayas elegido la institución que mejor se adapte a ti, ya sea por sus comisiones bajas o facilidad de uso, puedes dirigirte a su plataforma digital.
En ella podrás iniciar sesión mediante tu correo electrónico o nombre de usuario y contraseña, además de realizar posibles medidas adicionales de seguridad.
Luego, deberás enviar recursos a tu cuenta para empezar a comprar acciones. Para ello, las casas de bolsa te proporcionan una Clave Bancaria Estandarizada (CLABE) que te permite realizar una transferencia desde alguna cuenta en otra institución, aunque también pueden ofrecerte otras formas de añadir fondos.
Cuando ya tengas recursos en tu cuenta, puedes dirigirte a la sección para comprar y vender acciones y otros valores. Recuerda que las acciones son una parte proporcional de alguna empresa, por lo que al comprarla te conviertes en socio, por pequeña que sea.
En estas plataformas, las acciones y otros instrumentos financieros se identifican mediante algo llamado "ticker", un código que suele incluir tres o cuatro letras y que se asocia con una compañía en particular. Por ello, deberás investigar el ticker de la empresa que te interese.
Ya que lo tengas, el siguiente paso es crear una orden de compra. Ahí podrás colocar el precio que quieras, pero sólo se ejecutará si otra persona ya había colocado una orden de venta con el mismo precio, o bien uno menor.
También puedes dejar "abierta" dicha orden, esto para que la transacción se realice cuando otra persona llegue e indique que quiere vender una acción por ese mismo precio.
Sin embargo, presta atención al precio actual de la acción que te interesa, es decir, al monto de la última transacción que se realizó en la plataforma, puesto que los vendedores lo tomarán como referencia para elegir su propio precio.
Y eso es todo. En cuanto se haya completado el movimiento, tendrás una o varias acciones de alguna empresa a tu disposición. El proceso para vender es muy similar, ya que se lleva a cabo en estas mismas plataformas.
Cabe mencionar que mediante las casas de bolsa puedes comprar y vender acciones de empresas mexicanas, pero también de otros países, incluido Estados Unidos. Además, existen otros instrumentos financieros que también se comercian aquí.
Esto incluye títulos de valor que corresponden, por ejemplo, a materias primas y a metales preciosos. También pueden ser fondos de inversión cotizados en bolsa (ETFs), que son administrados por alguna empresa e igualmente permiten diversificar tus inversiones.
Aquí tienes dos consejos publicados por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) por si planeas participar en el mercado de valores:
1. Tómatelo con calma: Si quieres poner a trabajar tu dinero, también puedes fijarte antes en otras opciones, tales como cuentas de ahorro, pagarés y cetes, entre otras. Al diversificar, se reduce el riesgo y adquieres distintos niveles de liquidez (disponibilidad).
2. Invierte en tu cultura financiera: Un consejo básico es no invertir en aquello que no conoces, y aunque no necesitas ser un experto en finanzas para invertir en bolsa, si te conviene saber de qué te hablan los ejecutivos y asesores para tomar decisiones activas.