Como hemos mencionado anteriormente, el ahorro no solo implica guardar dinero para nuestras necesidades futuras, sino que esta práctica también representa nuestra seguridad y libertad financiera. Esto nos permite enfrentar emergencias inesperadas, realizar inversiones inteligentes y cumplir metas a largo plazo, así como comprar una casa, financiar la educación de los hijos o disfrutar de la jubilación con tranquilidad.
En esta ocasión, en DeDinero te compartimos el método de ahorro 50/30/20, una regla recomendada por diversos financieros gracias a su efectividad, con el fin de que las personas puedan cumplir sus objetivos financieros.
Se trata de una estrategia financiera que ayuda a las personas a gestionar de forma correcta sus ingresos y gastos. Esta regla fue popularizada por la política y académica Elizabeth Warren mediante su libro “All Your Worth; The Ultimate Lifetime Money Plan”, el cual fue publicado en el 2025; si bien la también senadora estadounidense no inventó esta técnica, sí la dio a conocer como una guía simple para la gestión financiera personal.
Esta regla funciona de la siguiente forma:
Este rubro debe estar dirigido para cubrir gastos esenciales y básicos como el pago de la hipoteca o renta, el gasto de alimentos, servicios públicos, transporte y seguro de salud. Cada uno de estos gastos se considera como prioritario, ya que no se pueden evitar y son necesarios para mantener nuestra calidad de vida.
El dinero dirigido a este apartado será utilizado para aquellos gastos conocidos como no esenciales, como pueden ser entretenimiento, comer fuera de casa, viajes, compras de ropa, hobbies y más. Si bien cada uno de estos gastos no son esenciales, sí ayuda a mejorar nuestra calidad de vida, ya que nos permite disfrutar de los ingresos generados en el trabajo en actividades que nos causen cierto placer o desestrés de la rutina diaria.
Este último rubro está destinado totalmente para el ahorro o para las inversiones. Actualmente existen una variedad de opciones financieras que ayudan a incrementar el ahorro mediante rendimientos.
Es importante señalar que este esquema se puede adaptar a las necesidades de cada individuo, ya que hay personas que no pueden aportar el mismo porcentaje a los rubros mencionados.