Una manera efectiva de cuidar la salud de tu familia y proteger tu economía es organizando tus compras de forma estratégica. Para ello, es esencial planificar cuidadosamente la lista de la despensa, aprovechar las ofertas y descuentos disponibles, y en cuanto a los alimentos, es recomendable planificar las comidas de manera que sean más baratas en comparación con la comida chatarra.
Realizar una despensa inteligente es fundamental para ahorrar dinero y evitar el desperdicio de alimentos en México. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) ofrece varios consejos para optimizar tus compras y mantener tu despensa bien abastecida sin excederte en los gastos.
Lo primero que debes hacer es una lista y planificar tus comidas. Antes de ir al supermercado, planifica las comidas de la semana y haz una lista de lo que realmente necesitas; esto te ayudará a evitar compras impulsivas y a enfocarte en lo esencial.
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Durante tu visita al mercado o centro comercial, mantente atento a las promociones. Algunos días de la semana suelen tener descuentos especiales en ciertos productos, como frutas, verduras, carnes y productos de limpieza.
Considera comprar a granel. Adquirir productos como arroz, frijol, lentejas, avena y otros alimentos no perecederos a granel es más bara que comprar en pequeñas cantidades, además, puedes almacenar estos productos por más tiempo.
Algo que también recomienda la Condusef es elegir productos de temporada porque las frutas y verduras de temporada suelen ser más baratas y frescas. Además, comprar productos locales reduce el costo de transporte, lo que también se refleja en el precio final.
No todas las tiendas ofrecen los mismos precios, y las marcas genéricas suelen ser tan buenas como las reconocidas, pero a un costo menor. Aprovecha esto para reducir tu gasto sin sacrificar la calidad.
Muchas tiendas ofrecen programas de lealtad con los que puedes acumular puntos, recibir descuentos adicionales o acceder a promociones exclusivas. Inscribirte en estos programas puede generar ahorros significativos a largo plazo.
Evita comprar cuando tienes hambre, es un consejo simple pero efectivo. Comprar con hambre puede llevarte a adquirir productos innecesarios, especialmente aquellos que son más caros o menos saludables.
Lo mejor que puedes hacer es mantener tu despensa ordenada para saber exactamente qué tienes y evitar comprar productos que ya posees. Esto también ayuda a evitar que los alimentos se echen a perder por no ser consumidos a tiempo.
