En nuestros hogares, la comodidad que nos brindan los electrodomésticos tiene un costo, y no solo se refleja en el precio de compra, sino también en el consumo energético que se traduce en un recibo de electricidad más alto.
Hoy en DeDinero analizaremos cuál es el electrodoméstico que más consume energía en el hogar y cómo puedes reducir su impacto en tu factura eléctrica de la Comisión Federal de Electricidad, es decir tu recibo de la CFE.
Para identificar el electrodoméstico con mayor consumo energético, es importante comprender la distribución del consumo de energía en un hogar típico.
Según estudios realizados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), los principales consumidores de energía son la refrigeración, la calefacción, la iluminación y los aparatos electrónicos.
El electrodoméstico que lidera la lista de los que más consumen energía es la nevera o congelador. Este aparato esencial en cualquier hogar opera las 24 horas del día, los 7 días de la semana, lo que lo convierte en un consumidor constante y significativo de energía.
Otro de los grandes consumidores de energía en el hogar es el aire acondicionado. En regiones con climas muy cálidos y olas de calor, este aparato puede representar la parte más importante y cara del recibo de la CFE, especialmente durante los meses de verano.
"Nosotros hemos llegado a pagar hasta 4 mil pesos en el recibo de la CFE solo porque tenemos el aire acondicionado", reveló a DeDinero una madre de familia que reside en Matamoros, Tamaulipas.
En zonas frías, la calefacción se convierte en una necesidad, pero también en uno de los mayores consumidores de energía. El tipo de calefacción que utilices (eléctrica o de gas) y la eficiencia de tu sistema influirán considerablemente en tu consumo energético.
Estos electrodomésticos consumen una cantidad considerable de energía cada vez que se ponen en marcha.
El uso frecuente del horno y la cocina eléctrica también puede incrementar notablemente la factura de electricidad, especialmente si no se utilizan de manera eficiente.
Los aparatos electrónicos como televisores, sistemas de sonido y consolas de videojuegos pueden ser grandes consumidores de energía, especialmente cuando se dejan en modo de espera cuando nadie los utiliza.
Muchos electrodomésticos continúan consumiendo energía incluso en modo de espera. Desconectar estos aparatos cuando no se están usando puede hacer una diferencia.
Invertir en electrodomésticos con mejor clasificación energética (A+++, A++) puede significar un ahorro considerable a largo plazo.
Reducir el uso de iluminación artificial durante el día puede disminuir el consumo de energía.
Utilizar lavadoras y secadoras a carga completa y solo cuando sea necesario optimiza su uso y reduce el gasto energético.
Identificar y entender cuál es el electrodoméstico que más consume energía en nuestros hogares es importante para tomar medidas que nos permitan reducir nuestro gasto energético y de dinero. Ahora ya sabes cómo identificar a los responsables de un alto consumo de electricidad que encarecen tu recibo de luz de la CFE.