El pago mínimo de una tarjeta de crédito puede parecer una tabla de salvación mensual, pero es una red que, si no se maneja con cuidado, puede llevar a acumular una deuda considerable.
A continuación, exploraremos qué implica realmente optar por esta opción y cómo puede impactar tu salud financiera a largo plazo.
El pago mínimo en las tarjetas de crédito es la cantidad más pequeña que el emisor de la tarjeta permite pagar en tu factura mensual para mantener la cuenta en buen estado.
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Este monto varía entre tarjetas y se calcula como un porcentaje del saldo total adeudado, generalmente entre el 2 por ciento y el 5 por ciento, más los intereses acumulados durante el período de facturación. El propósito del pago mínimo es ofrecer una opción flexible sin que la cuenta caiga en cartera vencida.
Pagar más del mínimo es una práctica recomendada para evitar intereses adicionales. Si solo pagas el mínimo, el resto de tu saldo continúa acumulando intereses. En cambio, pagar más allá del mínimo reduce el principal de tu deuda más rápidamente, disminuyendo así la cantidad de intereses que generas en el futuro.
Pagar después de la fecha límite puede tener consecuencias negativas. Primero, la mayoría de las compañías de tarjetas de crédito cobran una tarifa por pago tardío.
Además, los pagos tardíos pueden afectar negativamente tu puntaje de crédito, especialmente si se acumulan o son frecuentes. Esto puede llevar a dificultades para obtener futuros créditos o condiciones menos favorables.
La mejor manera de manejar una tarjeta de crédito es pagar el total del saldo antes de la fecha de corte cada mes. Esto te permite evitar completamente los cargos por intereses y mantener un buen historial crediticio.
Si esto no es posible, intenta pagar más del mínimo siempre que puedas para reducir el saldo principal más rápidamente y acumular menos intereses.
No hay un límite específico en la cantidad de veces que puedes hacer el pago mínimo, pero no es recomendable adoptar esto como un hábito.
Antes de poder manejar tu deuda, necesitas entender cuánto dinero entra y cuánto sale de tus cuentas cada mes. Crea un presupuesto que detalle tus ingresos y tus gastos, y úsalo para controlar tus finanzas. Asegúrate de incluir una categoría de pago de deudas en tu presupuesto.
Como se mencionó anteriormente, realizar sólo el pago mínimo puede prolongar la deuda y aumentar la cantidad total de intereses pagados. Intenta pagar más del mínimo en cada ciclo de facturación para reducir el capital más rápidamente.
Estas son dos estrategias efectivas para pagar múltiples deudas. La estrategia de la "bola de nieve" implica pagar primero las deudas más pequeñas para obtener victorias rápidas, mientras que la "avalancha" se enfoca en pagar primero las deudas con las tasas de interés más altas, lo cual es más eficiente desde el punto de vista de los costos.
Si tienes múltiples tarjetas con altas tasas de interés, considera la posibilidad de consolidar tus deudas en un solo préstamo con una tasa de interés más baja. Esto puede simplificar tus pagos mensuales y reducir la cantidad de intereses que acumulas.
Mientras trabajas en pagar tus deudas actuales, es crucial que evites acumular nuevas deudas. Esto significa vivir dentro de tus medios, evitar compras impulsivas y pensar cuidadosamente antes de usar tu tarjeta de crédito.