Si tu vehículo sufre algún daño en un estacionamiento público, la responsabilidad de cubrir los gastos puede depender de varios factores, incluyendo la legislación local y las políticas del propio establecimiento.
En la Ciudad de México, según la Ley de Establecimientos Mercantiles, estos establecimientos están obligados a contratar un seguro de responsabilidad civil o una fianza para garantizar el pago de daños de hasta un equivalente de 977 mil 130 pesos. Sin embargo, la cobertura puede variar dependiendo de las circunstancias.
Ante esta situación, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) explica que la cobertura por daños a vehículos en estacionamientos públicos, varía según la modalidad del servicio, pues existen dos situaciones principales:
- Autoservicio: El estacionamiento es responsable por el robo total o parcial del vehículo, los daños parciales y el incendio del inmueble, siempre que el incidente sea atribuible a una falta o negligencia del operador.
- Valet parking: En este caso, los acomodadores de vehículos son responsables por el robo total o parcial, los daños al vehículo y a los accesorios entregados junto con el automóvil al momento de la recepción, como puede ser el control remoto o las llaves adicionales.
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Es importante destacar que la cobertura por inundaciones suele estar excluida en muchos seguros. Esto es especialmente relevante en estacionamientos subterráneos, donde es más probable que ocurran estos eventos.
En estos casos, es fundamental revisar si el estacionamiento tiene una póliza específica para este tipo de riesgos.
¿Cuál es la información que debe contener el boleto de estacionamiento?
Cuando se utiliza un estacionamiento público, el boleto que recibes no solo es una constancia del servicio, sino también un documento que puede ser crucial en caso de algún problema. De acuerdo con la normativa, este boleto debe incluir los siguientes datos:
- Nombre o razón social del prestador del servicio y su domicilio.
- Clave del RFC del establecimiento.
- Números telefónicos para reportar quejas.
- Clasificación del estacionamiento y la tarifa correspondiente.
- Número de boleto, junto con la hora de entrada, salida y el número de placa del vehículo.
- Mención de la responsabilidad por daños durante el tiempo en que el auto está bajo su guarda.
Tener en cuenta estos detalles puede ayudarte a conocer tus derechos y la cobertura a la que tienes acceso en caso de cualquier incidente en un estacionamiento público.