A veces, al pagar con tu tarjeta bancaria, cuando estás preparada o preparado para digitar el NIP de autorización, solo recibes un gracias del cajero. Entonces, te queda la duda de si pagaste o no.
Para que no andes con esas dudas cada vez que te toque pagar algo con tu tarjeta, en DeDinero te contaremos en qué situaciones es cuando se usa el NIP de autorización.
Antes que todo, es importante definir qué es el NIP y cuál es la importancia de este para mantener seguras tus transacciones financieras o compras.
El NIP es definido como el Número de Identificación Personal y son 4 dígitos personales que se encuentran asociados a cada una de tus tarjetas de crédito y débito.
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El NIP puede ser personalizable, es decir que tú mismo puedes escoger los cuatro dígitos que lo conforman.
Para tener un NIP seguro, crea uno que sea fácil de recordar para ti, pero difícil de adivinar para una persona extraña.
Procura no compartir tu NIP con ninguna persona, aun cuando tengas mucha confianza en ella, y evita números consecutivos, por ejemplo: 0000, 1111 o 1234.
Pero para pagar alguna compra no siempre se requiere digitar ese número, ¿cuáles son las ocasiones en las que no solicitan el NIP?
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) reveló los 4 tipos de compras en los cuales no te solicitan este dato y las razones detrás de esta práctica.
Una de las compras sin NIP es con montos menores a 300 pesos. En muchas tiendas o establecimientos, especialmente aquellos de pequeñas compras diarias, como tiendas de conveniencia, se permite realizar transacciones de hasta 300 pesos sin necesidad de ingresar el NIP.
Esto se debe a que el riesgo tanto para la entidad financiera como para el usuario es considerado bajo debido al monto reducido de la transacción.
También entran las compras con tecnología NFC, situación común al utilizar la tecnología Near Field Communication (NFC).
Al realizar compras mediante este método, simplemente acercas tu tarjeta de crédito o débito a la terminal bancaria y la transacción se completa sin necesidad de ingresar ningún dato extra. Esto agiliza el proceso de pago y es utilizado en muchas locales.
Si configuraste pagos recurrentes o domiciliados en tu tarjeta de crédito o débito, como suscripciones a servicios de streaming, es probable que no necesites ingresar tu NIP para autorizar estos cargos. Sin embargo, es importante recordar que en algunos casos sí se requerirá el CVV.
Cuando realizas compras a través de internet, por lo general, no necesitas ingresar tu NIP. En su lugar, es probable que te soliciten el código de seguridad de la tarjeta (CVV), que consta de tres dígitos.
Esto se debe a que, al utilizar medios de pago digitales, se omite el uso de la versión física del plástico, y la información ingresada es suficiente para verificar la autenticidad de la transacción.
El avance tecnológico y financiero simplificó muchos aspectos de nuestras vidas, incluidas las transacciones comerciales. Estos cuatro casos muestran cómo el uso de tarjetas de crédito y débito se volvió más conveniente y seguro en diversos escenarios.