Hay muchos mitos alrededor de las tarjetas de crédito y es por eso que en DeDinero reunimos 12 puntos clave para que ese dinero que el banco te presta sea siempre tu mejor amigo, y no se convierta en un peligro para tus finanzas.
"Los intereses te comen", dicen por ahí, y aunque es cierto, la realidad es que usar una tarjeta de crédito de manera responsable es más sencillo de lo que parece, sin que eso signifique un costo muy alto para tu bolsillo.
¿Qué consejos hay para darle un buen uso a la tarjeta de crédito?
1. Lee todos los términos y condiciones: Antes de usar tu tarjeta de crédito, asegúrate de entender completamente los términos y condiciones, incluyendo tasas de interés, límites de crédito, cargos por retraso y otros cobros importantes.
2. Checa cuánto ganas y cuánto gastas. Asegúrate de que tu capacidad de pago sea suficiente para cubrir tus compras con la tarjeta.
3. No gastes más de lo que puedes pagar al final del mes. Así evitarás una bola de nieve de deudas.
4. Siempre paga a tiempo para evitar cargos por retraso y mantener un buen historial crediticio.
5. Si solo pagas el saldo mínimo, estarás sujeto a tasas de interés elevadas. Trata de pagar más que el mínimo para reducir tu deuda más rápidamente.
6. No uses tu tarjeta de crédito para compras compulsivas o caprichos que no analizaste antes. Piensa dos veces antes de hacer una compra y asegúrate de que sea algo que realmente necesitas.
7. Lleva un registro de todas tus transacciones con tarjeta de crédito para que puedas controlar tus gastos y además detectar cualquier actividad extraña.
8. Si notas algo raro en tu reporte o estado de cuenta, no dejes pasar el tiempo y comunícate con el banco emisor de la tarjeta de crédito de inmediato.
9. Si tu tarjeta de crédito ofrece programas de recompensas o beneficios (cashback), aprovéchalos siempre y cuando no te lleven a gastar más de lo necesario.
10. Si tienes dificultades para obtener una tarjeta de crédito tradicional debido a un mal historial crediticio o falta de historial, considera una tarjeta de crédito asegurada, que requiere un depósito de seguridad y puede ayudarte a construir o reconstruir tu crédito.
11. Cuando navegues en Internet nunca compartas tu información de tarjeta de crédito, como el número de tarjeta y el código de seguridad, a menos que estés seguro de que estás realizando una transacción legítima.
12. No superes tu límite de crédito, pues esto puede resultar en cargos por sobregiro y un impacto negativo en tu historial crediticio.
Ahora ya sabes que una tarjeta de crédito es una herramienta financiera poderosa que puede ser tu mejor amiga si se usa de manera responsable.
De lo contrario, puede llevar a problemas financieros y estrés económico.