Cada año, el inicio de la Cuaresma trae consigo una serie de cambios en los hábitos de consumo en México. En particular, los pescados y mariscos se convierten en los productos estrella durante este período de abstinencia de carne, lo que eleva la demanda y, con ello, los precios.
Este 2025, la situación no ha sido diferente, con incrementos que oscilan entre el 12% y el 18% en comparación con el año pasado.
Los consumidores se enfrentan a una disparada de precios que no solo afecta a los productos más populares, como el camarón y el atún, sino también a otros alimentos del mar que tradicionalmente se consumen durante estas fechas.
Aumento de precios en pescados y mariscos.
La Cuaresma 2025 ha comenzado con un aumento considerable en los precios de los mariscos en los mercados de la Ciudad de México. Según reporta El País, el costo de ciertos pescados ha pasado de 120 pesos a más de 600 pesos por kilo en algunos casos.
Esta subida se debe a una combinación de factores, entre ellos el aumento en la demanda durante estas seis semanas de Cuaresma, así como los costos de distribución y la escasez de algunos productos debido a condiciones climáticas adversas.
Por ejemplo, el kilogramo de camarón crudo ha visto un aumento de entre 295 y 430 pesos, mientras que el camarón pacotilla ha alcanzado precios de entre 280 y 335 pesos.
Otros mariscos como el pulpo y el filete de pescado también han experimentado aumentos significativos, con precios que ahora varían entre 280 y 380 pesos por kilo para el pulpo, y entre 285 y 384 pesos para el atún.
El incremento en los precios no es solo una consecuencia del aumento en la demanda durante la Cuaresma. Factores adicionales como los altos costos de transporte y la falta de algunas especies marinas debido a la sobrepesca también han influido en este aumento de precios.
El CEO menciona que las altas tarifas de transporte, especialmente en el caso de mariscos importados, contribuyen a que los precios de venta en los mercados y supermercados sigan al alza.
Además, los precios no solo dependen de la especie, sino también de la calidad del producto. El salmón, por ejemplo, es uno de los mariscos más caros, con precios que rondan entre 390 y 490 pesos el kilo.
En contraste, la mojarra, habitualmente más accesible, ha subido hasta 142 pesos el kilo, reflejando una tendencia generalizada de aumento en el costo de los mariscos.
Consecuencias para los consumidores
Para los consumidores que dependen de estos productos en la Cuaresma, este aumento de precios puede representar un desafío significativo para sus presupuestos.
Las familias mexicanas, que habitualmente disfrutan de estos alimentos durante las festividades religiosas, se ven obligadas a ajustar sus compras o buscar alternativas más económicas.
Además, con la presión inflacionaria generalizada y el aumento de otros costos de la vida, la Cuaresma de 2025 se presenta como un desafío financiero para muchas familias mexicanas que buscan equilibrar su consumo de productos marinos con sus necesidades diarias.
Sin duda, el aumento en los precios de pescados y mariscos es algo esperado durante esta temporada; los consumidores deben tomar decisiones financieras cuidadosas para seguir disfrutando de estos alimentos sin comprometer su economía familiar.
