Si tu deseo es tener una gran boda en un futuro cercano, es esencial equilibrar el deseo de un día perfecto con la realidad financiera actual con la que vives porque ¿vale la pena pagar una deuda por varios años con tal de obtener la boda del siglo?
Es momento de sacar lápiz y papel porque la planeación de una boda tiene muchos detalles que quizá no imaginaste en un principio, entre los que destacan: el lugar del evento, los anillos, el banquete y el número de invitados. No comiences el gasto en suposiciones porque podrías terminar endeudado.
Lo mejor es elaborar un presupuesto, te será más fácil saber con cuánto dinero cuentas, para no salirte de control al hacer las compras de todo lo que se requiere para la celebración.
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La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) comparte una guía para ayudarte a planificar una boda hermosa sin exceder tu presupuesto:
Tener la boda de tus sueños sin poner en riesgo tus finanzas es posible, siempre y cuando compares con tiempo y sepas qué necesitas, para así tomar con calma la mejor decisión.