El Buró de Crédito es una entidad que genera diversas opiniones en la sociedad, por eso es importante entender su papel y cómo impacta en nuestra vida financiera.
Su función principal es recopilar y gestionar información sobre el historial crediticio de personas y empresas, y proporcionar estos datos a las instituciones financieras.
Este servicio es esencial para que las entidades puedan administrar el riesgo de manera más eficiente al momento de otorgar créditos.
El Buró de Crédito es una empresa privada autorizada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la cual tiene como objetivo centralizar la información crediticia de los usuarios en México.
En su base de datos se encuentran los detalles de los créditos que han sido adquiridos, ya sean hipotecarios, personales, automotrices, entre otros. Este sistema se actualiza, al menos, una vez al mes, registrando tanto los pagos puntuales como los atrasos en las obligaciones financieras.
El Buró de Crédito es conocido por ser una herramienta clave para las instituciones financieras, ya que les permite evaluar si un solicitante de crédito es un candidato viable o si representa un riesgo considerable.
Es importante resaltar que la información que maneja esta entidad es confidencial, y solo se comparte con las instituciones que tienen la autorización correspondiente.
Uno de los aspectos más importantes del Buró de Crédito es el score o puntuación que asigna a cada usuario. Este puntaje es una referencia que las instituciones financieras utilizan para determinar la capacidad y la responsabilidad de un individuo o empresa en el manejo de sus créditos.
El score varía según el comportamiento crediticio y se identifica mediante un código de color que va desde el rojo (riesgo alto) hasta el verde (riesgo bajo), con una escala de puntos que oscila entre 449 y 775.
Cuanto más alta sea la puntuación, mayores serán las posibilidades de acceder a mejores condiciones de crédito, como tasas de interés más bajas y montos más elevados. En contraste, si se incurre en morosidad o atrasos en los pagos, la puntuación disminuirá, afectando la capacidad de obtener nuevos créditos en el futuro.
En caso de enfrentar dificultades para cumplir con las obligaciones financieras, es recomendable regularizar la situación lo antes posible para minimizar el impacto negativo en el historial crediticio.
Aunque se liquiden las deudas, el historial crediticio no desaparece de inmediato del Buró de Crédito. Según la Ley para Regular a Sociedades de Información Crediticia y las reglas generales emitidas por el Banco de México (Banxico), la información se mantiene en la base de datos durante un plazo de 72 meses (seis años) a partir de la fecha de liquidación de la deuda.
Esto significa que aunque hayas pagado tus deudas, tu historial seguirá reflejando esa información por un tiempo considerable, lo cual puede influir en futuras solicitudes de crédito.
Además de su función principal, el Buró de Crédito ofrece una serie de servicios que pueden ser de gran utilidad para los usuarios que buscan monitorear su situación crediticia y proteger su identidad financiera.
La eliminación de la información sobre los créditos registrados en el Buró de Crédito está regulada por los artículos 23 y 24 de la Ley para Regular las Sociedades de Información Crediticia y las reglas generales de Banxico.
El tiempo que tarda en eliminarse esta información depende del monto adeudado:
El Buró de Crédito es una herramienta indispensable para las instituciones financieras y para los usuarios que desean mantener un control riguroso sobre su historial crediticio. Entender cómo funciona, cómo se calcula el score y los servicios adicionales que ofrece puede ayudarte a tomar decisiones más informadas y a proteger mejor tu salud financiera.