La Plaza Izazaga 89, ubicada en el Centro Histórico de la Ciudad de México, ha sido clausurada recientemente por las autoridades debido a la comercialización de mercancías ilegales.
Este caso ha generado un caos entre comerciantes y clientes del lugar, ya que incluye un proceso de extinción de dominio, una herramienta legal que permite al Estado tomar posesión de bienes relacionados con actividades ilícitas.
Pero, ¿qué trámites fiscales faltaron por parte del propietario de este inmueble? Aquí te voy a explicar qué se le “olvidó” al dueño tramitar ante las autoridades de nuestro país.
¿Qué es la extinción de dominio?
La extinción de dominio es un procedimiento legal aplicado a bienes que han sido utilizados o relacionados con actividades ilícitas como el contrabando, la piratería o el lavado de dinero. Este mecanismo no compensa a los propietarios y se activa cuando estos toleran o permiten actividades ilegales sin actuar para evitarlas.
En el caso de Plaza Izazaga 89, la comercialización de productos ilegales como mercancías de contrabando y piratería fue el detonante para iniciar este procedimiento. Las autoridades consideran que los dueños no solo permitieron estas prácticas, sino que incumplieron con varias obligaciones fiscales y legales.
Plaza Izazaga 89: Obligaciones fiscales incumplidas ante el SAT
Entre las irregularidades detectadas en este caso, están las siguientes:
1. Falta de denuncia de actividades ilícitas
Los propietarios del inmueble no informaron a las autoridades fiscales como el Servicio de Administración Tributaria y a las autoridades judiciales sobre las actividades ilegales que ocurrían dentro de su propiedad, como lo exige la legislación vigente.
2. Incumplimiento en la facturación de arrendamientos
En muchos casos, los arrendatarios de los locales comerciales no emitían facturas ni cumplían con las obligaciones fiscales correspondientes. Este tipo de práctica también recae en responsabilidad de los propietarios del inmueble al no supervisar el cumplimiento fiscal de los locatarios.
3. Omisiones en declaraciones fiscales
Las autoridades detectaron posibles omisiones en la declaración de ingresos por concepto de arrendamiento del inmueble, lo cual constituye un delito fiscal.
4. Tolerancia de productos ilegales
La venta de mercancías de contrabando y piratería en un inmueble también puede generar responsabilidades fiscales, ya que estas actividades afectan directamente la recaudación tributaria.
Declaraciones de Marcelo Ebrard por caso Plaza Izazaga 89
Marcelo Ebrard, Secretario de Economía, confirmó que se presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) para iniciar el proceso de extinción de dominio sobre Plaza Izazaga 89. Este mecanismo se aplica cuando los propietarios tienen conocimiento de actividades ilícitas y no actúan para detenerlas.
Según la Ley Nacional de Extinción de Dominio, los bienes que se relacionen con actividades delictivas como el contrabando, el narcotráfico o la piratería pueden ser confiscados por el Estado, aun cuando no exista una sentencia penal en contra del propietario.
¿Cuándo abrirá Izazaga 89?
Ante esta pregunta, en el número de WhatsApp de la tienda se anuncia lo siguiente: “Les informamos que por instrucciones de los propietarios del edificio la plaza permanecerá cerrada hasta nuevo aviso”.
El caso de Plaza Izazaga 89 es un recordatorio importante para los propietarios de inmuebles comerciales sobre la necesidad de cumplir con las obligaciones fiscales y legales.
Entre las principales medidas que deben tomar los dueños de propiedades para evitar este tipo de problemas están:
- Supervisar las actividades de los arrendatarios: Garantizar que los locatarios cumplan con las leyes fiscales y no realicen actividades ilegales.
- Emitir facturas y declarar ingresos: Cumplir con las obligaciones fiscales ante el SAT para evitar sanciones.
- Reportar actividades sospechosas: Informar de manera oportuna a las autoridades sobre cualquier actividad ilícita que ocurra en sus propiedades.
El caso de Plaza Izazaga 89 pone de manifiesto la importancia de cumplir con las leyes fiscales y supervisar las actividades que se realizan en inmuebles comerciales. Las consecuencias legales y fiscales de no hacerlo pueden ser severas, incluyendo la pérdida total del bien mediante un proceso de extinción de dominio.