Ante todos los impuestos que deben pagar los contribuyentes en México, quizá te preguntes cómo puedes reducirlos. Esto es posible mediante las deducciones, que consisten básicamente en pagar por algún producto o servicio que necesites y restar parte de su costo a tus aportaciones fiscales.

Dicho de otra forma, hay ciertos gastos que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) contempla para que tengas una menor .

Esto aplica para personas físicas y morales (empresas), pero aquí te compartimos los conceptos que puedes tú deducir de manera personal en tus declaraciones anuales.

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¿Qué gastos de salud son deducibles de impuestos?


Como explica el SAT, cuando pagues horarios médicos, dentales o por servicios profesionales en materia de psicología o nutrición podrás deducirlo, siempre que sean prestados por personas con título profesional expedido legalmente y registrado ante las autoridades educativas.

También aplican los gastos hospitalarios y medicinas incluidas en facturas de hospitales (no se aceptan comprobantes de farmacias), honorarios a enfermeras, análisis y estudios clínicos, así como la compra o alquiler de aparatos para rehabilitación.


Además, los gastos médicos deducibles de impuestos incluyen las prótesis, los lentes graduados para corregir efectos visuales, en adición a las primas por seguros de gastos médicos, ya sean complementarios o independientes a los de instituciones públicas de seguridad social.

Todos estos conceptos son deducibles si los efectuaste para ti, para tu cónyuge o concubino/a, tus padres, abuelos, hijos o nietos.

¿Qué gastos puedes deducir por educación?


Igualmente puedes deducir las colegiaturas en instituciones educativas privadas con validez oficial desde el nivel básico hasta medio superior, aunque con límites establecidos por el SAT.

Considera que las cuotas por concepto de inscripción o reinscripción no son deducibles, mientras que para el transporte escolar aplica solamente si es obligatorio. En todos los casos, requieres del comprobante de pago correspondiente.

¿Qué más puedes deducir de impuestos en México?


Como explica el SAT, otros conceptos que puedes deducir cuando presentes tu declaración anual son gastos funerarios de tu cónyuge o concubino/a, así como padres, abuelos, hijos o nietos.

Igualmente son deducibles los intereses por créditos hipotecarios destinados a tu hogar, los donativos a instituciones autorizadas para recibirlos, las aportaciones voluntarias a tu Afore, además del pago por impuestos locales de salarios.

Como señala el servicio de Administración Tributaria, puedes informarte a profundidad si consultas las disposiciones fiscales que apliquen a tu régimen, pero en DeDinero también te recomendamos recurrir a un contador.

¿Cómo deducir impuestos en México?


Ahora que sabes cuáles conceptos puedes deducir de impuestos, quizá te preguntes cómo hacerlo. El primer paso es solicitar una factura cada vez que pagues por alguno de los productos y servicios anteriormente citados, para lo cual deberás proporcionar tus datos fiscales, en específico:

1. Registro Federal de Contribuyentes (RFC)

2. Nombre y apellidos

3. Denominación o razón social

4. Régimen fiscal

5. Código postal

Este paso otorga otros beneficios, pues ayuda a hacer efectivas las garantías, acreditar la propiedad de tus bienes, comprobar gastos como parte de algún presupuesto, o contar con un soporte documental de la contabilidad.

Considera que las facturas pueden emitirse bajo uno de estos tres esquemas distintos: CFDI, CFD o impresos, pero todas puedes verificarlas mediante la plataforma del SAT. Y una vez que hayas juntado tus facturas, podrás incluirlas en tu declaración anual de impuestos para deducir gastos.

Como siempre, recuerda buscar asesoría de un profesional. Dirígete con un contador, quien podrá ayudarte a presentar tus declaraciones y, en el mejor de los casos, obtener un saldo a favor.

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