Una de las formas en las que algunos mexicanos suelen obtener ingresos es mediante la renta de sus casas o departamentos. Si bien esta práctica puede ser una buena manera de generar ingresos adicionales y potencialmente aumentar el valor de la propiedad, existen algunos riesgos asociados con el alquiler de una propiedad, como los daños a la vivienda.
Es por ello que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda a todas las personas que deciden poner en renta alguna propiedad, que adquieran un seguro de arrendamiento y así evitar que su patrimonio quede desprotegido.
Son pólizas con coberturas que protegen a los propietarios de viviendas de alquiler de las pérdidas financieras causadas por daños a la propiedad, lesiones a los inquilinos u otras responsabilidades relacionadas con la vivienda. Estos seguros normalmente cubren de los principales riesgos a los que está expuesto un inmueble, los cuales son:
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Así mismo, este seguro cuenta con la característica de proteger al arrendador en caso de que su inquilino no pague la renta o, en el peor de los casos, se nieguen a desalojar la propiedad cuando se les solicite, evitando así problemas legales. Existen diversos seguros de arrendamiento, sin embargo la Condusef menciona cuales son las principales coberturas que la póliza debe cubrir.
Sin embargo, la misma Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros menciona que este seguro no tiene cobertura en la protección de los inquilinos que habitan el hogar, en caso de ocurrir un siniestro como un incendio, robo o inundación, la aseguradora no cubrirá los daños ni las pérdidas.