En México, la propiedad y administración de las calles frente a las casas están regidas por diversas leyes y reglamentos que determinan la responsabilidad de su mantenimiento, uso y regulación.
Hoy en DeDinero te presentamos una explicación actualizada basada en la legislación mexicana.
Las calles en México son consideradas bienes de dominio público, lo que significa que son propiedad del Estado y están destinadas al uso común de todos los ciudadanos. Esto incluye tanto las calles urbanas como rurales.
Por lo tanto, ningún individuo o entidad privada puede ser propietario de una calle pública.
Según el artículo 27, la propiedad originaria de las tierras y aguas dentro del territorio nacional corresponde a la Nación, y esta tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, en la forma que determine la ley.
Sin embargo, las calles y otros bienes destinados al uso común están reservados como bienes de dominio público.
Esta ley establece en su artículo 7 que los bienes de uso común, como las calles, plazas y caminos, son propiedad de la Nación y están bajo la jurisdicción de los municipios o del gobierno federal, según corresponda.
En el artículo 744, se establece que los bienes del dominio público de la Federación son inalienables, imprescriptibles e inembargables, lo que significa que no pueden ser vendidos, transferidos o reclamados por ningún individuo o entidad privada.
El mantenimiento de las calles y la regulación del uso del espacio público son responsabilidades del gobierno municipal o, en algunos casos, del gobierno estatal o federal. Esto incluye la pavimentación, reparación de baches, alumbrado público, señalización vial y la recolección de basura.
Existen algunas calles privadas o cerradas dentro de fraccionamientos o comunidades cerradas, en las que la responsabilidad de mantenimiento recae sobre los residentes o la administración del fraccionamiento. Sin embargo, estas calles son parte de la propiedad privada y no forman parte del dominio público.
Así es como la calle frente a tu casa es propiedad del Estado, y está destinada al uso común de todos los ciudadanos. Como residente, no eres dueño de la calle, pero puedes contribuir al mantenimiento y buen uso de la misma siguiendo las regulaciones locales y reportando cualquier problema al gobierno municipal. Si necesitas más detalles porque tienes dudas acerca de una revisión específica de la legislación aplicable a tu localidad, te recomiendo consultar con un abogado especializado en derecho público o bienes inmuebles.