Existen personas que, a lo largo de su vida, nunca han sentido la necesidad ni el interés de solicitar un préstamo. Prefieren pagar en efectivo y gestionan sus finanzas de manera eficiente.
Sin embargo, aun cuando su situación económica es estable, puede presentarse la oportunidad de comprar una vivienda a buen precio, lo cual podría requerir la obtención de un crédito hipotecario. A pesar de su solvencia, es común que los bancos rechacen estas solicitudes, ya que la ausencia de un historial crediticio puede interpretarse como una falta de experiencia en el manejo de deudas y pagos.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) describe al historial crediticio como un historial financiero de una persona en donde se pueden ver cuántos créditos ha tenido, que tan puntual es en sus pagos y si tiene deudas o no.
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Una buena calificación en tu historial crediticio es uno de los principales requisitos para acceder a un préstamo personal o un crédito hipotecario. La razón principal por la que las entidades bancarias lo consultan es para evaluar los riesgos o beneficios de otorgar estos préstamos.
Si tu solicitud de préstamo fue rechazada por varios bancos a pesar de no tener deudas pendientes, no te lances a endeudarte con prestamistas informales o a empeñar bienes como tu automóvil.
La principal razón detrás de la denegación de tu crédito es la ausencia de historial. Obtén un plan telefónico o de Internet a tu nombre, solicita una tarjeta de crédito en la entidad donde recibes tu salario, tramita una tarjeta departamental y realiza compras a plazos sin intereses. Estas acciones demostrarán tu capacidad de pago y te harán visible para las instituciones financieras.
Antes de contraer compromisos financieros, es importante que definas tu capacidad de pago. A grandes rasgos, tus deudas no deberían exceder el 30 por ciento de tus ingresos. Considera esto para asegurar un excelente historial crediticio.
Además, ten presente los gastos fijos que debes hacer mensualmente. Así, sabrás cuáles son tus límites y si puedes adquirir nuevos compromisos.
Como has podido notar, hay múltiples vías para alcanzar tu objetivo de comprar una casa. Empieza desde hoy mismo a generar tu historial crediticio.