¿Alguna vez has escuchado que los feligreses, los pastores o sacerdotes se han robado o utilizado el diezmo para sus propios intereses? De acuerdo con los motores de búsqueda de Google, cientos de personas no saben lo que es el diezmo y para qué se utiliza.
Es por ello que en esta ocasión en DeDinero, te diremos el origen de esta palabra, cuál es su finalidad y en dónde se emplea.
¿Qué es el diezmo?
De acuerdo con el diccionario de la Real Academia Española (RAE), el diezmo es el “tributo del diez por ciento que sobre el valor de ciertas mercancías recibía la ley”. Y es que el origen de esta palabra proviene de la Biblia, específicamente del Antiguo Testamento.
En aquella época, la Ley le cobraba a los israelitas el 10 por ciento de lo que cosechaban y cultivaban, del ganado que tenían; básicamente era un impuesto que debían de otorgar al templo, el cual también servía como sueldo para los antiguos sacerdotes.
Sin embargo, después del nacimiento de Jesús, en el Antiguo Testamento, no se especifica que este pueblo tenía que realizar alguna contribución diezmal. Aunque, por otro lado, en este libro de la Biblia se explica que el pueblo de Cristo debe continuar haciendo ofrendas, como parte del agradecimiento de los recursos proveídos de Dios.
Actualmente, el diezmo es ocupado por la religión cristiana y católica, en donde cada hijo de Dios decide ofrendar la cantidad que desea dar de diezmo. Algunas iglesias cristianas enfatizan que sus miembros sigan otorgando el 10 por ciento de sus ingresos, mientras que en la iglesia católica, durante la “misa”, pasan una charola para que los feligreses pongan la cantidad que desean aportar; es común ver en estos recipientes monedas y en algunas ocasiones billetes.
¿El diezmo se puede deducir de impuestos?
De acuerdo con el Sistema de Administración Tributaria (SAT), para que los contribuyentes puedan deducir de impuestos su diezmo, la donataria (iglesia) debe estar autorizada para recibir donativos. Estas organizaciones deben ser sin fines de lucro, asociaciones civiles, fundaciones y más; básicamente son aquellas entidades que cumplen con los requisitos legales y fiscales del SAT, y que demuestran que utilizan el capital donado para los fines sociales y benéficos.
En la actualidad, el diezmo se utiliza para financiar los objetivos de las iglesias, como construir y mantener los templos, operar los diversos cursos e incluso como método de pago para los pastores en el caso de la iglesia cristiana.