En México, la figura del aval en las transacciones financieras es un elemento común pero a menudo malentendido, pues ser aval significa asumir una responsabilidad significativa, que puede tener consecuencias graves en caso de incumplimiento por parte del deudor principal.
Hoy en DeDinero te explicamos a profundidad las implicaciones de ser aval, los riesgos asociados y cómo esto puede afectar tu situación en el Buró de Crédito.
¿Qué significa ser aval?
Un aval es una persona física o moral que se compromete a responder por la deuda de otra persona en caso de que esta última no cumpla con sus obligaciones. Al aceptar ser aval, la persona está dando una garantía a la institución financiera, como Banco Azteca, BBVA, Banorte, Santander, o cualquier otro banco, de que la deuda será saldada, ya sea por el deudor principal o por la persona en sí.
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Si el deudor principal falla en su pago, la deuda pasa automáticamente a ser responsabilidad del aval, lo que implica que cualquier obligación financiera no cumplida por el deudor, recaerá directamente sobre la persona aval, incluso si no ha utilizado o se ha beneficiado de esa cantidad de dinero.
Tanto el deudor como el aval son reportados al Buró de Crédito, lo que afectará negativamente la calificación crediticia de ambos, limitando sus posibilidades de obtener créditos en el futuro.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), existe la posibilidad real de un embargo contra el aval si no cuenta con los recursos para enfrentar la deuda.
Esto significa que sus bienes pueden ser retenidos para saldar la deuda.
Medidas preventivas para ser aval y alternativas
Antes de aceptar ser aval, es importante considerar profundamente las siguientes recomendaciones:
Análisis de Riesgo: Evalúa la capacidad de pago del deudor principal y su situación financiera, así tendrás una comprensión clara del riesgo que estás asumiendo.
Conoce los términos del contrato: Checa bien que puedas entender completamente los términos y condiciones del contrato de crédito.
Asesoría legal: Considera la posibilidad de consultar con un asesor legal antes de firmar cualquier documento que te comprometa como aval.
Buró de crédito
La relación con el Buró de Crédito es directa y significativa, pues un incumplimiento de pago por parte del deudor principal no solo afecta su historial crediticio sino también el del aval.
Si bien es un proceso complejo, existen ciertas circunstancias bajo las cuales un aval puede desvincularse de esta responsabilidad, aunque generalmente requiere de la aprobación de la institución financiera y puede no ser una opción viable en todos los casos.
Ahora ya sabes que actuar como aval es una decisión que debe tomarse con seriedad y pleno conocimiento de las implicaciones que conlleva; es una responsabilidad que puede tener consecuencias significativas en tu vida financiera y legal.
Ser aval no es solo una firma en un documento: es un compromiso financiero que puede tener repercusiones duraderas en tu vida y en tu historial crediticio.
