La emoción de asistir al concierto de tu banda favorita puede llevar a confiar en las personas equivocadas: este es el caso de una joven mexicana que, a través de su cuenta en X, compartió una experiencia desgarradora sobre cómo fue estafada por una amiga cercana en la compra de boletos para ver a Stray Kids en México.
La relación entre ambas se fortaleció al trabajar juntas, compartiendo gustos y confianzas. La estafadora, consciente de la pasión de su amiga por Stray Kids, se ofreció a adquirir los boletos mientras la afectada se encontraba de viaje en Francia.
Confiando plenamente, la joven transfirió aproximadamente 14 mil pesos para un paquete VIP que incluía el acceso al concierto.
Sin embargo, con el paso del tiempo, las promesas de entrega de los boletos nunca se materializaron. Intentos de comunicación por diversas vías fueron en vano.
La estafadora cambió su número de teléfono, se mudó de ciudad y solo respondió esporádicamente en Facebook con evasivas. La víctima quedó sin boletos y sin el dinero invertido.
Para evitar ser víctima de este tipo de estafas, es esencial:
La historia de esta joven es un recordatorio de que, incluso en relaciones de confianza, es fundamental ser cauteloso al manejar transacciones financieras. La emoción de asistir a un concierto no debe nublar el juicio ni llevar a decisiones impulsivas que puedan resultar en pérdidas significativas.