En la actualidad, cada vez son más los casos de estudiantes universitarios, que buscan la manera de ganar dinero mientras continúan sus estudios.
Lograr un equilibrio entre las responsabilidades académicas y las necesidades financieras puede ser un desafío, pero también una oportunidad para desarrollar habilidades valiosas y generar ingresos adicionales.
Una de las alternativas que muchos jóvenes han decidido implementar para obtener ingresos durante su etapa estudiantil es la venta de comida o golosinas. En esta ocasión en DeDinero, te compartimos algunos ejemplos de estudiantes emprendedores que decidieron generar ingresos en sus universidades.
A través de su perfil de TikTok, José Castillo compartió su experiencia vendiendo los famosos “Boings congelados”. Este estudiante universitario comentó que decidió asociarse con un amigo para comenzar a generar ingresos en su universidad, vendiendo estos productos.
José, en su video, muestras el proceso de preparación de las congeladas, a las cuales se les agrega chamoy, dulce enchilado en polvo y gomitas. El precio de cada uno de los boings son de 25 pesos los chicos y 30 los grandes. Si bien en un principio no tenía clientes y le prohibieron vender en donde se encontraba, poco a poco fue vendiendo su mercancía en otro punto dentro de las instalaciones de la institución.
Si bien el joven de San Luis Potosí no menciona cuánto fue lo que vendió, podemos calcular que si contaba con unos 15 bonos chicos y 15 grandes, en total llegó a obtener la cantidad de 825 pesos.
Otra estudiante emprendedora es Patricia Zarazua, quien se dedica a vender donas pequeñas cubiertas de algún glaseado, empaquetadas en una bolsita de celofán. La también oriunda de San Luis Potosí menciona que al día lleva a la Universidad alrededor de 70 a 80 donitas.
Estos panecillos, le vende a un precio de 5 pesos cada una, y según comenta Patricia, todos los días se le acaban las donitas. Si hacemos un cálculo de la cantidad de dinero que genera al día, la estudiante vende entre 350 y 400 pesos al día, lo que a la semana vendría siendo un aproximado de entre mil 750 y 2 mil pesos.
El último del caso que mencionaremos será el de Alondra Aguilar, quien decidió vender bolsitas de dulces en la universidad. La joven mexicana explica que cada una de las bolistas de celofán que vende son de la medida 8 x 10, que a cada una de ellas le pone 20 piezas de cada uno de los dulces que vende (gomitas, bolitas de cereza y chocolates) y las llega a vender en 10 pesos.
Si bien no da a conocer la cantidad de bolsitas que llega a vender al día, es posible ver en su perfil que las ventas de dulces han dado frutos, pues actualmente cuenta con su negocio de snack bar.