Hace unos días el ex luchador del Consejo Mundial de Lucha Libre, Shocker, fue detenido por la autoridad de Oaxaca por aparentemente causar destrozos en un hotel.
Debido a ese hecho, el luchador fue engañado por su amigo y también colega, Latin Lover, quien a través de una transmisión de Facebook reveló que tuvo que engañarlo para poderlo llevar a una clínica de tratamientos en adicciones, “Baja del Sol”, la cual pertenece al reconocido boxeador mexicano, Julio Cesar Chávez.
Latin Lover narró que después de platicar con la pareja de Shocker, Gisela, tuvo que decirle a su amigo que él debía asistir a una firma de autógrafos en Culiacán, Sinaloa donde le pagarían 15 mil pesos.
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Pero en lugar de convivir con fanáticos de la lucha libre AAA y recibir 15 mil pesos, lo que recibió fue un ingreso a un Establecimiento Residencial de Atención a las Adicciones para ser atendido.
Doria Roldán, director de la lucha libre AAA, y Latín Lover se hicieron cargo de los gastos de traslado para que Shocker y Gisela viajaran a Culiacán.
Latín Lover comentó que varias personas estuvieron ayudando para que el exluchador se internara en la clínica de Julio Cesar Chávez, y que lo mejor es que él no se opuso y aceptó quedarse.
Al final, Latin Lover afirmó que Shocker “ya está en buenas manos” y Julio Cesar Chávez en su cuenta de X informó que ya se le está dando la ayuda que se merece en su clínica “Baja del Sol”.
La Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC) cuenta con una guía sobre la operación de los Establecimientos Residenciales de Atención a las Adicciones, donde describe cómo deben ser este tipo de establecimientos para que tengas la confianza de que tu dinero está bien invertido.
Por cómo notamos en el caso del luchador Shocker, no solo se gasta en la clínica, sino también hay gastos de traslado de la persona que va a recibir la atención y de los acompañantes que quizá deben ir a visitas constantes.
En México, el 84 por ciento de las clínicas para la prevención, tratamiento y control de las adicciones son establecimientos privados que ofrecen un modelo de atención de ayuda mutua, mixta o profesional.
Cada clínica debe especificar el modelo de tratamiento que llevará a cabo, puede ser cognitivo, conductual, comunidad terapéutica o de ayuda mutua.
También debe especificar la duración del tratamiento, costos del servicio, número de camas disponibles y ocupadas, y debe contar con la infraestructura y recursos humanos para atender condiciones de urgencias.
Algunos de los objetivos generales del tratamiento son:
La CONADIC menciona que la adicción es una enfermedad compleja, que afecta el funcionamiento del cerebro y del comportamiento, pero es tratable y no hay un solo tratamiento que sea el adecuado para todas las personas.
En cuanto a costos, hay servicios gratuitos y otros que se cobran dependiendo el resultado de un estudio socioeconómico. Algunos de los costos inherentes al tratamiento pueden ser el de una entrevista inicial, análisis complementarios, visitas médicas especializadas, terapias alternativas y consumo de algún medicamento.