El potente huracán Otis pasó por Acapulco, Guerrero, y dejó incomunicado al puerto; causó derrumbes, ruptura de caminos y cortes de energía que han imposibilitado al gobierno mexicano determinar la magnitud de los daños.
Entre las estructuras afectadas se encuentra el popular Hotel Princess, que resultó con severos daños derivado del fenómeno meteorológico.
Aún se espera información sobre las pérdidas humanas; por lo pronto, cabe también preguntarse por la devastación material.
El Hotel Princess de Acapulco Diamante recibió una inversión de 50 millones de dólares en 2015 para llevar a cabo una remodelación que duró varios años, donde se intervino la fachada y también cada piso.
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Como informó entonces Miguel Ángel Mondéjar, director comercial de la compañía Mundo Imperial, era necesario remodelar 600 habitaciones de las mil que tiene el hotel; para ello se dispuso hacerlo piso por piso, pero dejando en vacío entre la obra y huéspedes para no molestar.
El Hotel Princess había sido adquirido por Grupo Autofin y Mundo Imperial —presidida por Juan Antonio Hernández— también en 2015, junto al Hotel Pierre Marqués con un precio total de 180 millones de dólares por ambos establecimientos.
Esto muestra el enorme daño material que puede causar un huracán, aunque también resalta la importancia de cuidar el patrimonio y vidas humanas frente a posibles desastres naturales.
Adicionalmente, varios videos en redes sociales muestran la angustia de quienes se hallaban dentro del Hotel Princess. Entre ellos se encuentra una usuaria de TikTok identificada como Luisa Peña, quien explica que se encontraba en un viaje de trabajo.
Ahí narra que durante un punto llegó a estar en el ojo del huracán, pero que en otro momento se fue la luz y vivió una experiencia aterradora con vientos extremos: "Me escondí en el clóset y me puse a rezar, a meditar, a tratar de calmarme aunque el pánico se apoderó de mí".
Por su parte, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) anunció que instalará un centro de acopio en la Ciudad de México para ayudar a las personas damnificadas por el paso del huracán Otis en Acapulco.
La máxima casa de estudios anunció que se instalará junto a las astas bandera del Estadio Olímpico Universitario y abrirá a partir del 26 de octubre de 2023 al medio día.
Según explicó la UNAM, se estarán aceptando artículos como agua embotellada, alimentos enlatados, cobijas, insumos para primeros auxilios, objetos para higiene personal, ropa en buen estado, toallas femeninas y pañales.