Este martes 13 de febrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador reaccionó a las declaraciones de ayer del empresario Carlos Slim Helú, quien reveló que Teléfonos de México, más conocido como , ya no es un buen negocio.

Fue en su acostumbrada rueda de prensa matutina desde el Palacio Nacional, donde el mandatario fue cuestionado acerca de si el gobierno compraría la empresa para rescatarla o reestructurarla, a lo que respondió lo siguiente:

“No, de ninguna manera. Carlos ha tenido éxito porque es un empresario competente”.

, el magnate mexicano reconocido por ser uno de los hombres más ricos del país, expresó ayer en una conferencia de prensa sus perspectivas sobre la situación actual de su conglomerado empresarial, especialmente en relación con Telmex, la emblemática empresa de telecomunicaciones que ha sido parte integral del imperio empresarial de Slim durante décadas.

Slim señaló que, a pesar de los retos financieros y operativos que enfrenta Telmex, la cual ha estado operando en números rojos durante los últimos diez años, no tiene intenciones de vender la empresa.

Indicó que las dificultades económicas y las restricciones regulatorias en el actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador han limitado la capacidad de la empresa para diversificar sus servicios, especialmente en el ámbito de la televisión de paga, un servicio que aún no ha sido autorizado por el gobierno para Telmex.

“Van cinco gobiernos que no lo autorizan, somos la única empresa del mundo que no tiene servicios de televisión de paga, nos han hecho competir con un brazo amarrado”, añadió, en su conferencia organizada para aclarar “las cosas que se dicen”.

El empresario también criticó la falta de beneficios y apoyos hacia su grupo empresarial por parte del gobierno actual, mencionando específicamente su participación limitada en proyectos de infraestructura como el Tren Maya, donde solo lograron adjudicarse el tramo 2 de la obra.

"Al terminar este sexenio, hablaré con el presidente Andrés Manuel López Obrador de las cosas que diferimos", dijo.

Estas declaraciones ponen sobre la mesa las tensiones existentes entre el sector empresarial y el gobierno, y, dicho por el propio Slim, la necesidad de un diálogo constructivo y colaborativo para impulsar el desarrollo económico del país.

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